Collarín de desembrague defectuoso: los conocimientos especializados ayudan a prevenir daños

Un gran número de fallas de funcionamiento en los vehículos comerciales puede atribuirse a los efectos de sistemas de collarín de desembrague defectuosos. Entre estas fallas de funcionamiento se incluyen fallas "críticas" como embragues quemados o características de separación deficientes. Por lo tanto, es extremadamente importante revisar con precisión el sistema de desembrague. No hay muchos trabajos de mantenimiento en los que la concentración en unos pocos detalles puede tener un efecto tan grande y ahorrar gastos importantes. Nuestros consejos para talleres le ayudarán a detectar los sistemas de collarín de desembrague defectuosos con una inspección visual.

Los sistemas de collarín de desembrague defectuosos pueden presentar varios síntomas. Tres ejemplos nos permitirán explicar los tipos de daños que pueden producirse como consecuencia de un sistema de collarín de desembrague defectuoso:

Guía de montaje

Falla en el sistema de collarín de desembrague – desgaste
Casquillo de guía desgastado

Si los puntos de apoyo del casquillo de guía (mostrados en esta ilustración), la horquilla de desembrague o el eje de desembrague están desgastados, se pone en riesgo la facilidad de movimiento del embrague y, en el peor de los casos, puede desembocar en una falla total.

Comparación de la cima de contacto nueva y desgastada

Si a consecuencia de componentes desgastados el collarín de desembrague presenta defectos y ya no se guía con precisión, se genera también un movimiento excéntrico del muelle de diafragma. A su vez, esto produce una abrasión considerable en la línea de contacto (cima en forma de techo inclinado) del plato de presión. La posición axial del muelle de diafragma se modifica a consecuencia de ello y provoca un acoplamiento por fricción reducido, de modo que el embrague patina.

Características del posicionamiento incorrecto

Un collarín de desembrague colocado incorrectamente durante el montaje puede atascarse en la horquilla. Para empezar, esto provoca un embrague difícil de mover, la distancia de desembrague se vuelve más corta y el embrague no se separa correctamente. La horquilla atascada no puede transferir la fuerza al muelle de diafragma de forma efectiva. Después de poco tiempo, el embrague también empezará a patinar.

El desgaste del mecanismo de desembrague es uno de los motivos del aumento de fuerza en el pedal. Debe prestarse especial atención a las superficies de contacto de la horquilla de desembrague, las superficies de contacto del eje de desembrague y la horquilla de desembrague en sí. Si estas se encuentran ya en un estado de desgaste avanzado, como se muestra en la foto con el casquillo de guía desgastado, están dobladas, desgastadas o rotas, se producirá un efecto negativo sobre el rendimiento de cambio de marchas. Las consecuencias incluyen tirones del embrague, dificultades para separarlo o un mayor grado de dificultad para mover el embrague. Como no hay carga en el sistema de desembrague, un ensayo manual del funcionamiento del eje de desembrague no resulta efectivo. Resulta más práctico realizar una inspección visual.

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